La región Apurímac, en la sierra del Perú, se ubica sobre una geografía accidentada que combina altas montañas y cañones profundos, relieve que fue descrita por Antonio Raimondi como «papel arrugado donde el tiempo se detuvo hace siglos”.
La producción agropecuaria es la actividad principal en Apurímac, la misma que enfrenta un estancamiento debido a muchos factores y causas. Más del 60 % es una agricultura en Apurímac es familiar – campesina, responsable de la producción y abastecimiento de alimentos.
La agricultura familiar en Apurímac, se basa en el aprovechamiento de la agrobiodiversidad y la cosmovisión andina, es decir los productores – campesinos de la agricultura familiar son los guardianes de la variabilidad genética de tanta agrobiodiversidad y poseedoras de saberes locales ancestrales del manejo de las mismas, cultura y ritualidad.
Apurímac es una región biodiversa, en la que se pueden encontrar diversos tipos de bosque como son el bosque montano andino, bosque de Q’euñas, bosque altoandino, bosque de Unka, tolar, rodal de puya Raimondi y bofedal.
Los bosques de Polylepis son ecosistemas que requieren de mucha atención, porque en ellos habitan especies de aves amenazadas tales como el “churrete real” (Cinclodes aricomae), el “tijeral de ceja blanca” (Leptasthenura xenothorax), el “torito de pecho cenizo” (Anairetes alpinus). Este ecosistema existe, por ejemplo, en la zona de Rontoccocha, que es además la fuente principal de recurso hídrico para la capital apurimeña. Otros ecosistemas altoandinos presentes en la región son los matorrales, bofedal, pajonal, césped de puna, Plantación de especies arbóreas nativas y exóticas.
Algunos análisis hechos en territorios específicos de la Región (Mancomunidad Saywite Choquequirao) muestran que en los últimos 15 años, la perdida de bosques supera el 30% de la superficie original, y que los niveles de vulnerabilidad en varios distritos tienden a ser entre medios a altos, sobre todo en las zonas donde hay una mayor concentración de la población y vías de acceso.
Por ello, en la región se viene trabajando desde hace muchos años para el manejo y conservación de paisaje, especialmente de los bosques y ecosistemas andinos. El Programa Bosques Andinos, financiado por COSUDE, viene apoyando a actores locales en estrecha coordinación con el socio local CEDES y otras instituciones aliadas, como son el GORE Apurímac, SERFOR, SERNANP y la Comisión Ambiental Regional (CAR).
Estas actividades estuvieron concentradas principalmente en las comunidades de Ccerabamba, Huironay/Pacchani, San Ignacio de Kiuñalla, Atumpata, Micaela Bastidas y Llañucancha.
Entre estas actividades destacan la protección y recuperación de manantes en Kiuñalla y la cuenca de Rontococha, la implementación y sistematización de un monitoreo hídrico en distintos puntos del sitio, el apoyo a la implementación de un MERESE hídrico en Mariño, el piloto de restauración en Kiuñalla (101.5 hectáreas), el fortalecimiento de la estructura organizativa comunitaria en esta comunidad, el apoyo al programa regional de reforestación Sacha Tarpuy y la articulación y fortalecimiento institucional
El entorno de la Laguna Rontoccocha, en Apurímac (Perú) es una de las principales fuentes de agua para riego y consumo humano para la ciudad de Abancay y una población de casi 60 000 habitantes en la Microcuenca Mariño. La zona enfrenta diferentes presiones que han ocasionado un aumento de la vulnerabilidad de la población al desabastecimiento de agua, que las comunidades perciben de manera creciente.
Por ello se han emprendido algunas acciones para la recuperación y restauración ecológica de estas áreas y la implementación de una estrategia pionera de retribución por servicios ecosistémicos hídricos, de la que participan las instituciones estatales de regulación y suministro de servicios públicos (SUNASS, EPS EMUSAP), y que está generando recursos, vía tarifa, para la recuperación y restauración ecológica de áreas estratégicas para la provisión del recurso hídrico.
La única área natural protegida de Apurímac es el Santuario Nacional de Ampay (SNA), que es un espacio natural importante en la economía provincial; pues aporta recursos hídricos que se utilizan en la actividad agrícola en el Valle del Mariño; al igual que el agua que se consume en la ciudad o sectores periurbanos. Su atractivo natural viene siendo aprovechado relativamente en las actividades turísticas.
Por mejorar la conservación de áreas de importancia ecológica, se ha propuesto la creación de una reserva comunal de uso directo con la categoría de Área de Conservación Regional Comunal
Durante los últimos años se han observado ciertas tendencias que aumentan las presiones sobre los recursos, agudizadas por el contexto de emergencia debido al COVID-19, como son:
- Crecimiento de áreas de cultivos por intenciones de siembras por retornantes (hortalizas, cultivos pan llevar y crianzas de periodo cortos de producción)
- Producción de cadenas productivas como palta, papa, haba y arveja verde, cuy – alfalfa; que demandan de mayor cantidad de agua de riego y cambio de uso de suelos en los valles -áreas matorralizadas y bosque seco-
- Incremento de ocurrencias de incendios forestales y de praderas naturales
- Dificultades de apoyo oportuno -financiamiento y asistencia técnica- para la agricultura familiar campesina, desde el estado y niveles como son el GoRe y los GL, y las ONGs
- Variabilidad climática frecuente -sequias agronómicas, heladas, incremento del calor e intensidad de radiación, etc., que afectan directamente a los medios de vida y la salud de la población
- Valoración de la cadena alimentaria, trazabilidad y origen de los productos agropecuarios, basado en la agrobiodiversidad y producción ecológica – natural
- Necesidad de gestión del territorio y los recursos naturales con soporte social, a través de espacios y mecanismos multi actor y multi nivel – gobernanza territorial
La participación de los distintos actores clave en la gestión sostenible de los paisajes es muy importante, para ello existen distintos espacios de encuentro en los territorios que componen la región.
- Comisión Ambiental Regional – CAR y Grupos Técnicos,
- Comisión Ambiental Municipal – CAM y
- Comité de Gestión de la Microcuenca Mariño – CGMM y la plataforma de mecanismos de retribución de servicios ecosistémicos de Rontoccocha – MRESE (caso específico de esta microcuenca).
- Consejos de desarrollo comunal (comunidades campesinas).
Para fortalecer la gobernanza en Apurímac, CEDES Apurímac, con apoyo del Programa Bosques Andinos desarrolló una propuesta de Bosque Modelo para el ámbito de Abancay, que involucra a 3 distritos, 17 comunidades, con conectividad al área natural protegida Santuario Nacional Ampay – Tamburco. El área presenta con un área aproximado de 19,812.15 has de bosques andinos
Bosques Modelos
Los Bosques Modelo no son un esquema o un territorio en sí mismos, sino más bien son “procesos sociales, inclusivos y participativos que procuran el desarrollo sostenible de un territorio y por lo tanto contribuyen a alcanzar objetivos globales de reducción de pobreza, cambio climático, lucha contra la desertificación y metas de desarrollo sostenible”
En Latinoamérica, los Bosques Modelo se enlazan a través de la Red Latinoamericana de Bosques Modelo (RLABM), es una alianza voluntaria entre Bosques Modelo respaldados por representaciones gubernamentales de cada país miembro, la cual está adscrita a la Secretaría de la Red Internacional de Bosques Modelo (SRIBM).
Actualmente, la Red agrupa 33 territorios en agrupa 15 países de América Central, América del Sur, el Caribe y España que reúne trabajan para el buen manejo de los bosques y los recursos naturales en sus territorios.
Se espera que a través del proceso de Bosque Modelo se contribuya a:
- Visibilizar bosques andinos y avances
- Consolidar una propuesta de gobernanza multi actor y multinivel, plan comunicacional, para generar conciencia ambiental y resiliente
- Integrar al territorio en dinámicas de cooperación de sur a sur (investigación, planes de contingencia contra incendios y otros riesgos antrópicos y naturales)
- Fomentar el intercambio de experiencias con otros BM
- Incrementar la participación organizada de la población.