El pasado 28 de abril se realizó el evento de rendición de cuentas de la Mancomunidad del Chocó Andino de Ecuador, actividad en la que se presentaron los resultados de las principales acciones a llevadas a cabo durante el 2016 en la Mancomunidad.
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En el evento participaron los presidentes de los seis gobiernos parroquiales que conforman la Mancomunidad del Chocó Andino y el equipo técnico del Programa Bosques Andinos, el Proyecto EcoAndes, la Fundación Imaymana y CONDESAN, instituciones que vienen apoyando a la MCA.
Durante la apertura del evento Inty Arcos, coordinador de la MCA, resaltó que durante el 2016 se aprobaron dos ordenanzas metropolitanas que van a permitir consolidar a la Mancomunidad como un territorio sostenible: a) la Ordenanza Metropolitana 137 que establece a la Mancomunidad como un área de importancia ecológica, cultural y de desarrollo productivo sostenible y b) la Ordenanza Metropolitana 143, que establece la prohibición de actividades de explotación como la minería.
“La aprobación de estas ordenanzas nos va a permitir ir consolidando la región como un territorio sostenible y seguir impulsando la conservación de la biodiversidad y la producción sostenible”, recalcó.
A su turno el presidente de la Parroquia de Nanegal, Washington Benalcázar, destacó que la Mancomunidad recientemente se convirtió en el primer Bosque Modelo de Ecuador gracias al reconocimiento de la Red Iberoamericana de Bosques Modelo (RIABM). “Este logro fue fruto de un trabajo intenso que realizamos durante casi dos años y representa un hito importante no solo para nuestro territorio sino para todo el país”, indicó.
Precisó también que se han establecido más de 20 parcelas permanentes para estudiar el estado de conservación de los bosques y el impacto de actividades de restauración. Adicionalmente se está monitoreando la calidad del agua en algunas cuencas prioritarias del territorio. “Los resultados de estos estudios servirán de sustento científico para tomar medidas en pro de la conservación del territorio”, finalizó.
Fortaleciendo capacidades para el desarrollo del territorio
El fortalecimiento de capacidades de líderes locales ha sido otro de los puntos de interés en la Mancomunidad. De esta forma, se han realizado seminarios de capacitación en temas de comunicación a jóvenes líderes. Dicha capacitación incluyó una pasantía en el Bosque Modelo de Tierras Adjuntas en Puerto Rico para conocer de cerca la experiencia de una radio comunitaria.
Asimismo, se destacaron las más de 30 propuestas sobre conservación y restauración de bosques, manejo del territorio y producción agropecuaria sostenible que recibió el 1er Concurso de Buenas Practicas Sostenibles realizado entre agosto y diciembre del 2016. Más de 17.500 dólares de premios se repartieron entre los 9 ganadores del concurso.
Reconocimientos
El esfuerzo de la Mancomunidad por conservar su territorio no ha dejado de ser reconocido en diversas plataformas. Recientemente obtuvo el primer puesto del Premio Verde 2017, galardón otorgado por el Banco de Desarrollo de Ecuador y en el 2016, durante su participación en la Cumbre Hábitat III recibió el premio a mejor stand de exhibición en la categoría Comunidades y Barrios Sostenibles.
El Chocó Andino avanzando hacia el futuro
Entre los retos que se vienen para el futuro Benalcázar indicó que ya se ha iniciado el proceso de declaración de la mancomunidad como Reserva de Biósfera por parte de la UNESCO. Esta iniciativa es liderada por el Gobierno Autónomo Descentralizado de Pichincha y está siendo apoyada por la Mancomunidad del Chocó Andino.
“De igual forma seguiremos impulsando la Red de Bosques Escuela para brindar educación constructivista con temas precisos sobre cambio climático y agroecología partiendo desde el conocimiento local pero sin alejarnos de lo científico”, señaló Inty Arcos.
Respuestas al Cambio Climático
Cabe resaltar que el trabajo del Programa Bosques Andinos con la Mancomunidad del Chocó Andino (MCA) se enmarca en un paraguas conceptual más amplio de adaptación al cambio climático basado en la gobernanza. Como se sabe los sistemas sociales y ambientales en paisajes de bosques andinos son complejos y vulnerables frente al cambio climático, por ello trabajar con plataformas de gobernanza como la MCA permite abordar de forma efectiva tres retos principales:
El primero es promover la coordinación efectiva entre actores que comparten intereses y trayectorias de desarrollo comunes, pero por encontrarse en paisajes de bosques andinos donde las dinámicas ambientales cambian drásticamente en cortas distancias, requieren respuestas adaptadas a estos contextos. Se espera que estas acciones concertadas sean más efectivas que acciones tomadas de forma individual en un marco de crecientes impactos del cambio climático sobre el acceso y uso de recursos naturales clave como el suelo y el agua.
En segundo lugar, el trabajo con plataformas de gobernanza de meso-escala como la MCA promueve alianzas colaborativas entre actores locales, municipales, provinciales, agencias del gobierno central, entre otros. Las agendas de trabajo de estos actores tienen elementos comunes relevantes para la adaptación y mitigación del cambio climático, pero existe el riesgo de duplicidad de esfuerzos y vínculos débiles con procesos locales. La MCA cumple la función de generar un espacio de trabajo que promueve la sinergia entre las agendas de estos actores y las necesidades y contexto específico del territorio.
El tercer reto que aborda el trabajo con este tipo de procesos de gobernanza es facilitar la formulación e inclusión de objetivos y acciones de sostenibilidad en los procesos y herramientas de planificación y gestión del territorio. Plataformas como la MCA buscan facilitar a los gobiernos locales y a otros actores del territorio la formulación participativa y puesta en marcha de prácticas, esquemas y herramientas de manejo territorial que incluyan objetivos de sostenibilidad, incluyendo acciones como conservación y restauración de hábitat críticos, monitoreo y mantenimiento de servicios ecosistémicos hídricos críticos, fortalecimiento de capacidades locales para la comunicación de dinámicas socioambientales, entre otros.
El trabajo en estos objetivos está siendo facilitado por el Programa Bosques Andinos en el marco de su proceso de colaboración con la Mancomunidad del Chocó Andino, con la finalidad de robustecer la resiliencia de los sistemas socioecológicos locales frente al cambio climático. Estas acciones están demostrando importantes impactos positivos a nivel local y tienen un alto potencial para servir como capital de réplica en otras áreas de Ecuador y los Andes.
“Los presidentes de los seis gobiernos parroquiales toman una decisión histórica cuando empiezan a pensar en territorios que no son islas y deciden establecer la Mancomunidad como un nivel de gobierno” – Inty Arcos
“Para consolidar la Mancomunidad se han puesto semillas desde hace más de 30 años. Todo este conglomerado de saberes y buenas voluntades está reconocidas en la Mancomunidad que no habla solo de la conservación sino también de soberanía y buen vivir creado desde lo local” – Daniela Balarezo
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